Cartas a sus amigos
Sinopsis
Muchas de estas cartas de Ramón Gaya han de considerarse de la misma naturaleza e importancia que sus ensayos, tal y como el propio Gaya consideraba, por ejemplo, los dibujos de Rembrandt o de Goya respecto de los cuadros que ellos mismos pintaron. Desde luego, una carta tiene mucho de dibujo. Como en algunos dibujos, en éstas los relieves e improntas de la vida, la espontaneidad y el trazo rápido parecen resaltar el aliento que las originó, y conservan toda la frescura del momento en que fueron escritas. Leídas de corrido, estas cartas dan la impresión de que nos hallemos ante una autobiografía, o cuando menos ante un autorretrato. Lo extraño es que esa autobiografía involuntaria (nada más alejado de Gaya que el propósito de contarnos «su» vida, ya que pocas cosas desdeñó tanto como la Historia) esté hecha apenas con un puñado de cartas escritas en diferentes momentos y sin continuidad. Pese a ello, a través de ellas podemos imaginarnos toda su vida, tal y como ocurre con un pequeño fractal. Creo que el lector que no haya conocido a Ramón Gaya en vida, podrá hacerse también una idea bastante aproximada de su personalidad. El conjunto de todo ello nos proporciona una secuencia biográfica (cabría decir «autobiográfica») del pintor y escritor murciano, como no teníamos hasta hoy.
ANDRÉS TRAPIELLO