Cuando nos llegó este libro a la librería, la primera pregunta que se nos pasó por la cabeza fue; ¿Qué tendrá para que un editor como Jacobo Siruela haya decidido publicarlo? La respuesta no tardó en llegar. Las estancias secretas es un libro que te captura en su primera lectura y te fascina cuando lo lees por segunda vez. No en vano Chimal está consagrado como uno de los mejores narradores del mundo de literatura fantástica de este primer cuarto del siglo XXI, o como dicen en México, el mejor en el género de lo insólito. Esta antología de diecisiete relatos recorre gran parte de su obra, lo que hace que en algunos momentos nos encontremos con algún sorprendente bache de lectura, pero en su conjunto se entiende y agradece. El libro fusiona géneros como la ciencia ficción, el realismo más crudo y lo mítico, pero también nos acerca al pensamiento filosófico (Variación sobre un tema de Coleridge) o nos sorprende su sensibilidad poética (Mesa con mar). Todo esto mezclado con antiguas leyendas, imaginativos desdoblamientos y sutiles pinceladas de humor, hace que este libro se aleje de las modas literarias actuales, creando una antología diversa que juega con los límites de los géneros.
Podríamos deciros y exclamar; ¡nos os perdías! ¡Es un libro imperdible! ¡Nos os arrepentiréis! Pero todos sabemos que esas cosas no son del todo ciertas; ahora bien, es posible que, leyendo un par de relatos diarios de este libro, siempre con el apoyo de una copita de vino, encontréis ese momento tan anhelado y efímero de felicidad.